Maestría en Cultura Física – Fundamentación


El plan y los programas de este posgrado se estructuran a partir del concepto de aprendizaje como un proceso complejo e intencionado en el que la docencia concretiza la institucionalización de la educación en la sociedad a través de la escuela y la trasciende, entendemos a la docencia como una acción que promueve de manera deliberada la obtención de experiencias que fomentan y facilitan el aprendizaje, el cual se define como un proceso permanente de apropiación y construcción de conocimientos, desarrollo de habilidades, conformación y fortalecimiento de valores que capaciten al sujeto para la transformación de la realidad.

La formación de educadores físicos significa promover su desarrollo personal y profesional, con el propósito de transformar las prácticas profesionales en las que ponen en juego sus capacidades para educar sujetos capaces de desarrollar su dimensión física, orientándola a un desarrollo armónico e integral.

Desde esta perspectiva, se destaca la revalorización de la corporeidad en el hecho educativo, que se expresa en la aceptación de la unidad del ser humano en todas sus manifestaciones y su educabilidad, a través de la actividad física con una visión de integridad. Esta se hace evidente en las propuestas educativas actuales, en las que el aprendizaje corporal es considerado como objeto educativo, como los son otros tipos de aprendizajes, ya que se considera necesario crear condiciones para que el hombre aprenda a utilizar su cuerpo de una manera eficaz, según los propósitos que persiga en cada momento. El hombre nace con capacidades trasmitidas genéticamente, pero éstas no se desarrollan adecuadamente sino es a través de la actividad y muchas no llegarían a su plenitud si no se ejercitan en el momento oportuno. Es aquí donde, sobre la base de la intencionalidad, se conforman las actividades educativas que pueden contribuir al desarrollo ontogenético del hombre.
La educación física se propone darle una intención a la corporalidad, su quehacer no concierne solo al cuerpo, sino al hombre como unidad. Se concibe como una disciplina formativa que va más allá de la educación formal, constituye un proceso permanente que promueve el desarrollo armónico e integral del educando.

Por lo anterior, entre los requerimientos básicos que se han considerado al diseñar este programa de posgrado para la formación de profesionales de la cultura física, se destacan los siguientes:
Un profundo conocimiento del educando y una sólida cultura pedagógica que les permita comprender y dimensionar su quehacer cotidiano. Habilidades didácticas que les faciliten la interacción con el sujeto de aprendizaje.

Competencias para expresarse y comunicarse con el sujeto de aprendizaje. Capacidades para la investigación, especialmente de los aspectos que condicionan sus prácticas en el ámbito donde se desempeñan.

Los conceptos expuestos permean el plan y programas de estudio de la Maestría en Cultura Física que ofrece la UPV.